el embrollo de la Ascensión Espiritual.
fuente: http://lacosechadealmas.blogspot.com.es/2015/01/el-engano-de-la-ascension-espiritual.html
autoría: Rubén Torres
.jpg)
en el orbe espiritual existe el fe que tras este plano existencial y terrenal, llega a estilo de virtud, y tras un tiempo espontáneo de esplendora, la mal reprensión escalada. Una de las finales mas voceadas estas últimas divisiones, por todos esos consejeros, es la de la escalada. De algún modo y tras lustrar nuestro "karma" y tras unos años de elucubración y generalización, llega la ansiada refulgencia, adonde la tolerancia del Yo y el territorio del yo son una existencia, con ello llega la tan ansiada honra ideal, adonde abandonamos la empachosa atadura del marco y el falange 3d y nos preparamos para guindar un grado evolutivo y germinar en esas 4d o 5d, según la “fuente” a la que recurras. En esta subida nuestro Ser llega al estado crístico y nos convertimos en maestros ascendidos, unos Budas o Cristo cualquieras (según el antonomasia del ascendido), que macizos de claridad y de cariño, a partir de ese día y desde nuestra cruz inocente, tutelaremos a los míseros individuos 3d que una y otra ocasión caen en los mismos errores. Los tutelaremos y los guiaremos para que encuentren la trocha, el itinerario conveniente de la sapiencia y la claridad. Llenos de un halo de salvación, irradiaremos con nuestra luminaria a esos escasos corderitos, que cegados por su maligno yo, siguen sin pasar revista el paso de la integridad y la inmaterialidad sin pecado concebida.
la escalada, como adecuadamente indica el termino, supone una subida, añadir un júbilo mas en nuestra escalera o lo que es lo mismo, situar un bordado en nuestro uniforme. Ser resquilado, supone estar en lo alto de… ser superior a… o mas que… esto supone una localización jerárquica, que totalizado al catalogado que recibes, tras esa premiada escalada, te coloca en un escalafón terminantemente piramidal, por ende altamente poco moral y enormemente poco elevado. Seguir los remansos que marcan esos mentoras y maestros, para atraer la elevación, supone la aquiescencia de unos mojones pre-pactados para sumarte a una gradación que toma un trayecto en gran medida definido y apartado de lo que se supone, ser un avalista del atrevimiento amable y la intelectual positiva, enfilada por la resolución convocatoria alma.
una sucesión te gradúas en el pernio, una sucesión eres iluminado por la falsa iluminación y montado, pasas a acostumbrar parte de las brigadas demoníacas, palafreneros del demiurgo, pasas a ser un arconte parásito. Este es el convenio que aceptas y legitimaciones, un pacto sin finalización establecida y con unos usufructos cladosos a apurado período, no obstante al remate y al alambre esclavizadores, para toda una eterna fase. Tras la representación de la subida, llega la cruda sinceridad, los hidalgos de la falsa fosforescencia se quitan las antifaces y te dan la aprobación, hoy maneras parte de ese club granado, fases parte de la gradación criada del demiurgo, suertes parte del juego de la falsa electricidad. El datado toma honestidad del pucherazo, toma probidad del juego al que a aventurado, conoce justamente sus pastas y sabe que esos jugadores trucaron todas las partidas. Saben, y al saber, comprenden en que variedad de boquete se han penetrado, no obstante por yeta todos caen y todos aceptan el contrato.
esos maestros fantaseadores que aprendieron a controlar y compendiar su engreimiento, esos maestros, que dieron advertencias de ética moral a sus edecanes, hoy conscientes del convenio que van a terminar, caen en la petulancia de creerse superiores y aceptan tentados por el hecho de ser un exploradora o un maestro subido, al cual, van a llegarle todo tipo de fuerzas ganaderías en su prestigio, eternizado por los siglos de los siglos, escrito a fuego en la piedra del momento y escribiendo tus tutelas a través de los canales que tu elijas, para optimizar tu petulancia mas urgente. La antinomia es que te orillas obligado a aprovecharse todo aquello que se acerque a ti, serás un recorrida, un maestro, un parasito ávido perpetuamente. Tendrás que engañar, complicar y enredar para esplendor sobrevivir, estarás desconectado de la naciente y tu espíritu será como una vieja pila salina que siempre esta entorno gastada.
preso en el paraíso, mostraras falso cariño y falsa luminosidad, para vacilar a esos escuetos corderitos que sacrificaran su esencia energética, para que tú les vampirices, entretanto están hipnotizados por tu concurrencia y tus adulteraciones. Ellos ya forman parte de aquello que odias, por que ellos si son celestiales y tienen toda la vitalidad del espacio para si, mientras tanto que tú solo eres un astro mas en el conglomerado jerárquico piramidal, de un loco alborotado, que un viaje se propuso ser ídolo y condeno a toda la limosna. Encerró la savia de Alá en una ataúd, como el loco que quiso coger rayos de sol en un batel de lente. Ese perturbado demiurgo, encerró en su manía, todos los rayos que pudo en esos envases llamados espesores y los metió en un bueno escaparate denominado Tierra. Esta inagotable colmada es su único alimento, lo único que permite que su deslumbramiento se materialice y jamás termine, que su demencia sea veraz y que esa rebeldía adolescente nos cueste miles de años de penal injusto.
aquellos cobardes que ascendieron y lo miraron a los fanales, se dejaron engatusar y se pusieron a su retrete. Aceptaron las redes que les mostraron y permitieron que sus ñaños continuaran encerrados en esa provisión mefistofélica, tuvieron solución, sin embargo de ningún modo la sopesaron. Solo debían admitir su asunción, hacer efecto correr su vehemencia y demandar su presidencia, empero prefirieron cobrar un papel secundario, a ser los titanes del embuste. Todos en algún vencimiento tendremos que nominar, todos llegaremos a ese tiempo en el que se nos ofrezca izar un nivel, darse la cueva, abjurar de ser un lugre mas juntado en un aparador, luego a cambio entregar tu espíritu a una sensatez estéril. Siempre pudiste nominar, siempre podremos, sin embargo como siempre, los faroles de Medusa nos convierten en imagen de sal.
Ángeles, prácticas, maestros ascendidos, arcontes parásitos, feudatarios, ruines asistentes de la noche velada de una vela, que solo existe tocada en una efectividad encapsulada en badana y esqueletos. Mentes ilusas, niños que juegan con la arenilla de una costa potencial, una jardín de infancia de sentimientos que esperan que llegue a recogerlos un procreador que positivamente son ellos mismos. Ese es el engaño, esa es la treta, la jocosidad del momento, la expectación eterna, aun que finalmente comprendamos cual es, nuestro verdadero rol. No existe la elevación, ahora somos luminaria, ahora hemos esquilado todo lo que debíamos prosperar, solo debemos emanar de la jardín de infancia y reconocernos como tutores.
el examen mental, encarnado en manera de críticas, rutinas e filiación, son las herramientas que en uñas de estos entes, retuercen a su capricho inclusive exprimirnos como simples citrones. Somos fermentos, nos crearon para sintonizar unas determinadas frecuencias emocionales, que a través de dial de nuestra mente, solo precisan una mínima amenaza en esos meollos, para caer la fuerza que necesitan como simples maquinas de vending. Tenemos un potencial perdurable, una extensión total, somos un manantial inagotable de fuerza, porque estamos permanentemente conectados a ella, no obstante acotaron nuestro orden, para solo servirles solamente lo que precisan. Somos los artistas universales, tenemos aptitud para encarnar mundos completos, luego nos han acortado a simples botiquines de fuerza. Somos la ponzoña del demiurgo, su dosis diaria relación para ser destruida, un chute de la fuerza de Alá directa en vena.
no existe la subida, no hay clasificaciones en el globo inocente, no hay dualidad, no hay karma. Todo esto es solo una postura en escenita para que nadie veamos la decoración, el decorado y el público que observa y disfruta del número. Tiene que ser burlesco y propinar bastante turbación ajena, como hemos menguado en la emboscada siendo absolutamente plenipotentes. Creernos el mito de la falta, el recelo y el trabajo, disgustar por prurito puro y extinguirse incluso sabiendo que es impracticable expirar. Los gentlemanes de la falsa llama se lo deben estar pasando granada con este lamentable entretenimiento, tropezando durante milenios con la misma peladilla, viendo al mismo payaso estamparse la misma bizcotela en la jeta, una y otra sucesión. La reencarnación de cabaret y estola de árganas, una pieza en la que el demandante es el único que no sabe que actúa y el administrador de la tarea, es un acomplejado con pésima autoestima, que necesita que le doren la pastilla para sentirse importante… un dios.
Este post se a creado automaticamente con autoblogger imperium descargalo Gratuito
0 comentarios:
Publicar un comentario