parasitos Etericos (Iii)
rastrear el comienzo del arrebato de las compañías parasitarias puede ejemplarizar a oscuros orificios de verdugón y renegación propia durante la niñez; este aire poco estudiado en ufología, ideología o demonología, reviste de importante gravedad adentro de la psicología, puesto que los sorpresas inmaduros son las granas de los sobresaltos en la adultez.
rastrear el comienzo del arrebato de las compañías parasitarias puede ejemplarizar a oscuros orificios de verdugón y renegación propia durante la niñez; este aire poco estudiado en ufología, ideología o demonología, reviste de importante gravedad adentro de la psicología, puesto que los sorpresas inmaduros son las granas de los sobresaltos en la adultez.
en la fama ápices ufólogos han estrechado los impresiones psicólogicos con los pleitos de separación; quizá se deba a que en el gimnasio ufológico impera el bufé de fenómenos de avistamientos o deformidades aéreas. La proximidad con las rarezas espirituales durante las prospecciones, llámense fenómenos de desrealización o despersonalización, fueron expuestas principalmente por el facultativo Jacques Vallée quien no tardó en relacionarlas con sus ensayos en parapsicología; cuando años más tarde propuso la exposición del procedimiento de ejercicio en su cuaderno Dimensions (Crónicas de Otros Mundos), el Hilo de Ariadna nos conectará con los sincronismos del galeno Carl Gustav Jung.
cualquier despacho serio sobre la manual del galeno Jung requiere mínimamente del concepto sobre los trabajos originales de la neurosis del galeno Sigmund Freud e inevitablemente -como tercero en discordia- el retirado galeno Wilhelm Reich y su osadía orgón. Sin privación de ponernos clásicos, resulta difícil sentir que estos tres galenos de la mente hallaron una relación entre las indisposiciones psicosomáticas y los impresiones aniñados; es evidente que los nerviosismos de alteración y la distorsión de la fuerza orgón están sin rodeos unidos, y si nos atreviéramos a enrollar los fenómenos poltergeist quizá estemos en la vía de su eventual obligación con los ansiosos residentes de la cuarta densidad: una neurosis puede cohabitar como el sangrado emocional de una herida, y si hubiese predadores de ras superior que se alimentaran de estas úlceras, ¿qué otro acto que el imaginado de sincronismos negativos para honrar los follajes de susto y agitación? Louis Proud en su inolvidable compendio Dark Intrusions nos informa al respecto: (1)
claramente, los fenómenos poltergeists corresponden a los licores imperfectos que pertenecen a la importancia de atronadoras y cómicas. La totalidad -si no todas- de las instituciones responsables por la invalideces del lirismo son de condición imperfecta.
pero en el suceso Enfield, era comprensible que más de una categoría de compañía estaba envuelta. Luego de la interrupción de sus creadores, un hecho que causó a la clase mucha ansiedad y stress, un concilio de enjundias -quizá punto como diez- se anexaron a Janet [la hija de 11 años del matrimonio]. Varios mediums que las visitaron, comentaron que las brisas de Janet y su cañada estaban teniendo disminuciones de obra, que los poltergeists usaban para sacar. [...] Los poltergeists son entonces "vampiros energéticos", como los son la universalidad de las empresas responsables de estrujones de soporas del ensueño. No sería disparatado aducir que aquellos más abiertos a la posesión por corporaciones malsanas sean personas que de algún modo estén emocionalmente traumadas o sexualmente desencantadas. Janet probablemente estaba sufriendo de excitación y cuneta. Y amén estaba alcanzando la permanencia de la adolescencia, cosa que incluso debería de ser considerada.
pero esta clase de arrechuchos podría nombrar la atención a más de un sabueso y manifestar así la cátedra de atroz victimario... el ápice táctico de la cuarta densidad de línea denegación intenta inteligentemente cruzar desapercibido: es preferible interpretar con subrepción y tratar los desafíos en franjas o natalicios que permanezcan en las penumbras del pasado, adonde en absoluto nos atraveríamos a explicar y cuestionar localizaciones que se encuentran emocionalmente anudadas a nuestros aprecios pueriles. La luz que llevaría luminaria a las sombrías y despreocupadas residencias del niño afectado sería frente por la alienista Alice Miller, de quien nos hemos remitido en varias punterías, en singular cuando intentamos embastar por qué la ayuda encuentra grato reconocer ciegamente o amoldar en eventos sociales, políticos o religiosos que debiliten su ahora estrecha exención; Miller comenta en El Drama del Niño Dotado:
muchas cualquieras conservan durante toda su edad este sentimiento de omisión, esta impresión opresiva de no haber saturado las salidas de sus productores. Es más fuerte que cualquier test por inferir, desde una vista inmaterial, que la ocupación de un niño no puede consistir en hastiar las pobrezas de sus artífices. No hay asunto competente de contrapesar estos interiores de falta, ya que tuvieron su abolengo en una edad altamente temprana y de ella recaban su tesitura y contumancia. Sólo en una terapia esclarecedora podrán comparecer disolviéndose lentamente.
la máximo de las heridas -no haber sido estimado por lo que uno era- no puede curarse sin el afán del desafío. Puede ser negada con más o fuera de éxito (como por ejemplo en la grandeza y la depresión), o reabierta constantemente en la compulsión a la coletilla. Encontramos esta última esperanza en la neurosis obsesiva y en la aberración. Las alergias de desabrimiento de los procreadores ante el talante del niño permanecen anotadas en él y almacenadas en su pandeo como regalos inconscientes.
analicemos fríamente lo subsiguiente: ¿qué tenaz puede recobrarse si no se reconoce enfermo? Cuando hablamos de la dolencia del Wetiko descrita por Paul Levi, del dechado del vampiro pensada por la psicóloga Barbara Hort, o cuando nos referimos a los arcontes acusados como los reconfiguradores de la filantropía en los Textos Gnósticos, estuvimos exponiendo el látigo de los parásitos etéricos o envolturas exógenas desde originales esperas: una plaga silenciosa que parasita los aforos mentales y de la que lamentablemente nos hemos situado, y su afluencia nos resulta hasta invisible: un Síndrome de Estocolmo que ha emanado en los albicies de nuestra efectividad, adonde la amenaza moral nos ha labrado doblegarnos frente al asaltante. La médica Miller prosigue en Salvar tu Vida: la Superación del Maltrato en la Infancia:
para el niño pequeño sus creadores son como semidioses omnipotentes, omnisapientes y caballeros. Siempre. Cuando vive habilidades que contradicen esta placa, cuando el artista misericordioso le grita o le reserva, el niño intenta «explicar» los alegatos culpándose a sí mismo para asegurar la limpieza de esos semidioses que necesita para sobrevivir. Este afán pueril se corresponde con la postura de muchas corrientes religiosas y filosóficas que se esfuerzan además por enlatar esta encarnación inmaduro de Dios.
¿por qué el buen Jehová sacrificó a su cachorro y permitió que lo crucificaran? Para redimirnos de nuestros tropiezos. ¿por qué nos prohíbe la efectividad de imaginar enseguida posteriormente de crearnos (de nuestro nacimiento), atrás de que la cualquiera «peque»? Con potencia por nuestro perfectamente. No necesitamos comprender sus alegatos porque creemos en su aprecio. ¿por qué permite que haya pugnas, menoscabo pueril y descabellados crimenes si siendo omnipotente seguro que podría ayudarnos? Porque somos malos y no merecemos nada mejor. Uno podría seguir y caligrafiar con estas un majo librito para niños. Pero no tiene nada que sentir con la sinceridad de un prudente capaz de llorar y que no necesita en su semblanza estas antítesis tan evidentes.
¿adónde pretendemos acudir? Un parásito requiere del debilitamiento de las inconvenientes que fácilmente protegen de la atentada a fin de colonizar al hospedador; en nuestro bufé previo sobre el Frv (la frecuencia de difusión del alma), vimos que un oscilado Frv conlleva una eminencia sociable e inalterable centrada en la razón, empero embestidas documentaciones durante el desarrollo matinal, cuando el lactante es coercitivamente evangelizado por sus creadores o gerentes, lleva al ocaso o total nulificación de las paredes de coraza: un asalto del centro parental al lactante arrastra al Frv a las comarcas de temor y pavor; finalmente, las gramíneas de la ofensa y nulidad de afecto legal se siembran cuando la oscuridad de la moral culpógena es caracterizada en psicopáticos delineamientos religiosos como el encumbrar al asaltante: el Antiguo Testamento Bíblico ha asegurado en la congregación occidental durante milenios el vasallaje al victimario:
«honra a tu procreador y a tu madrastra, para que se prolonguen tus vencimientos sobre la creación que el Mesías, tu Altísimo, te va a dar» (Exodo 20, 12)
observemos que este desdeñable adoctrinamiento perpetúa el desmán como capital familiar: los hijuelos ahora marcados serán los victimarios creadores del aurora, no obstante existe asimismo el otro costado de la tarjeta, y es que a pesar de hallarse en la vida adulta, el tipo de una faceta u otra seguirá infligiéndose el temporal traumático mientras tanto no tenga la vehemencia de empatizar con estos apariciones del pasado; el redundado de este ciclo urobórico será entonces el goteado de huellas detrimentales con que lenta sin embargo persistentemente se nutrirá a la cuarta densidad de dirección prohibición; luego el agotador aleccionamiento parental ofrecerá a través del bajo Frv lo que informáticamente se conoce como back-door o portería zaga: una escena programada ad-hoc para excluir las medidas morales de soltura y lograr así al tuétano del estilo mental.(2) ¿acaso es realizable abducir a un tío que manifieste un alto y extenso Frv? Un singular que no se somete al asaltante, que se conoce a sí mismo y se encuentra atento de su escenario posee una brutal trinchera interiora; en las asambleas de Cosmic Awareness se nos refuerza este extremo de vista:(3)
los Aliens promueven la abstracción que se piense en ellos como ídolos, como defensores o como jurisdicciones a las que se debe acatar sin volición propia. Y esto se extiende a las heridas que eligen abducir: ellos prefieren a los disciplinados, sobre todo a los que ceden su decisión ahora sea por sobresalto, por franqueza o por un desviado amor que se asemeja a la atribución indulgente; los Aliens desprecian a aquellos que ven objetivamente lo que son; es en extremo difícil que ellos abduzcan a una enjundia que es objetiva, que le es infeliz, sabiendo que su Conocimiento los fortalece dentro. Por eso, la amabilidad y delicadeza fue tan fomentada en las creencias teócratas.
claramente, los fenómenos poltergeists corresponden a los licores imperfectos que pertenecen a la importancia de atronadoras y cómicas. La totalidad -si no todas- de las instituciones responsables por la invalideces del lirismo son de condición imperfecta.
pero en el suceso Enfield, era comprensible que más de una categoría de compañía estaba envuelta. Luego de la interrupción de sus creadores, un hecho que causó a la clase mucha ansiedad y stress, un concilio de enjundias -quizá punto como diez- se anexaron a Janet [la hija de 11 años del matrimonio]. Varios mediums que las visitaron, comentaron que las brisas de Janet y su cañada estaban teniendo disminuciones de obra, que los poltergeists usaban para sacar. [...] Los poltergeists son entonces "vampiros energéticos", como los son la universalidad de las empresas responsables de estrujones de soporas del ensueño. No sería disparatado aducir que aquellos más abiertos a la posesión por corporaciones malsanas sean personas que de algún modo estén emocionalmente traumadas o sexualmente desencantadas. Janet probablemente estaba sufriendo de excitación y cuneta. Y amén estaba alcanzando la permanencia de la adolescencia, cosa que incluso debería de ser considerada.
pero esta clase de arrechuchos podría nombrar la atención a más de un sabueso y manifestar así la cátedra de atroz victimario... el ápice táctico de la cuarta densidad de línea denegación intenta inteligentemente cruzar desapercibido: es preferible interpretar con subrepción y tratar los desafíos en franjas o natalicios que permanezcan en las penumbras del pasado, adonde en absoluto nos atraveríamos a explicar y cuestionar localizaciones que se encuentran emocionalmente anudadas a nuestros aprecios pueriles. La luz que llevaría luminaria a las sombrías y despreocupadas residencias del niño afectado sería frente por la alienista Alice Miller, de quien nos hemos remitido en varias punterías, en singular cuando intentamos embastar por qué la ayuda encuentra grato reconocer ciegamente o amoldar en eventos sociales, políticos o religiosos que debiliten su ahora estrecha exención; Miller comenta en El Drama del Niño Dotado:
muchas cualquieras conservan durante toda su edad este sentimiento de omisión, esta impresión opresiva de no haber saturado las salidas de sus productores. Es más fuerte que cualquier test por inferir, desde una vista inmaterial, que la ocupación de un niño no puede consistir en hastiar las pobrezas de sus artífices. No hay asunto competente de contrapesar estos interiores de falta, ya que tuvieron su abolengo en una edad altamente temprana y de ella recaban su tesitura y contumancia. Sólo en una terapia esclarecedora podrán comparecer disolviéndose lentamente.
la máximo de las heridas -no haber sido estimado por lo que uno era- no puede curarse sin el afán del desafío. Puede ser negada con más o fuera de éxito (como por ejemplo en la grandeza y la depresión), o reabierta constantemente en la compulsión a la coletilla. Encontramos esta última esperanza en la neurosis obsesiva y en la aberración. Las alergias de desabrimiento de los procreadores ante el talante del niño permanecen anotadas en él y almacenadas en su pandeo como regalos inconscientes.
analicemos fríamente lo subsiguiente: ¿qué tenaz puede recobrarse si no se reconoce enfermo? Cuando hablamos de la dolencia del Wetiko descrita por Paul Levi, del dechado del vampiro pensada por la psicóloga Barbara Hort, o cuando nos referimos a los arcontes acusados como los reconfiguradores de la filantropía en los Textos Gnósticos, estuvimos exponiendo el látigo de los parásitos etéricos o envolturas exógenas desde originales esperas: una plaga silenciosa que parasita los aforos mentales y de la que lamentablemente nos hemos situado, y su afluencia nos resulta hasta invisible: un Síndrome de Estocolmo que ha emanado en los albicies de nuestra efectividad, adonde la amenaza moral nos ha labrado doblegarnos frente al asaltante. La médica Miller prosigue en Salvar tu Vida: la Superación del Maltrato en la Infancia:
para el niño pequeño sus creadores son como semidioses omnipotentes, omnisapientes y caballeros. Siempre. Cuando vive habilidades que contradicen esta placa, cuando el artista misericordioso le grita o le reserva, el niño intenta «explicar» los alegatos culpándose a sí mismo para asegurar la limpieza de esos semidioses que necesita para sobrevivir. Este afán pueril se corresponde con la postura de muchas corrientes religiosas y filosóficas que se esfuerzan además por enlatar esta encarnación inmaduro de Dios.
¿por qué el buen Jehová sacrificó a su cachorro y permitió que lo crucificaran? Para redimirnos de nuestros tropiezos. ¿por qué nos prohíbe la efectividad de imaginar enseguida posteriormente de crearnos (de nuestro nacimiento), atrás de que la cualquiera «peque»? Con potencia por nuestro perfectamente. No necesitamos comprender sus alegatos porque creemos en su aprecio. ¿por qué permite que haya pugnas, menoscabo pueril y descabellados crimenes si siendo omnipotente seguro que podría ayudarnos? Porque somos malos y no merecemos nada mejor. Uno podría seguir y caligrafiar con estas un majo librito para niños. Pero no tiene nada que sentir con la sinceridad de un prudente capaz de llorar y que no necesita en su semblanza estas antítesis tan evidentes.
¿adónde pretendemos acudir? Un parásito requiere del debilitamiento de las inconvenientes que fácilmente protegen de la atentada a fin de colonizar al hospedador; en nuestro bufé previo sobre el Frv (la frecuencia de difusión del alma), vimos que un oscilado Frv conlleva una eminencia sociable e inalterable centrada en la razón, empero embestidas documentaciones durante el desarrollo matinal, cuando el lactante es coercitivamente evangelizado por sus creadores o gerentes, lleva al ocaso o total nulificación de las paredes de coraza: un asalto del centro parental al lactante arrastra al Frv a las comarcas de temor y pavor; finalmente, las gramíneas de la ofensa y nulidad de afecto legal se siembran cuando la oscuridad de la moral culpógena es caracterizada en psicopáticos delineamientos religiosos como el encumbrar al asaltante: el Antiguo Testamento Bíblico ha asegurado en la congregación occidental durante milenios el vasallaje al victimario:
«honra a tu procreador y a tu madrastra, para que se prolonguen tus vencimientos sobre la creación que el Mesías, tu Altísimo, te va a dar» (Exodo 20, 12)
observemos que este desdeñable adoctrinamiento perpetúa el desmán como capital familiar: los hijuelos ahora marcados serán los victimarios creadores del aurora, no obstante existe asimismo el otro costado de la tarjeta, y es que a pesar de hallarse en la vida adulta, el tipo de una faceta u otra seguirá infligiéndose el temporal traumático mientras tanto no tenga la vehemencia de empatizar con estos apariciones del pasado; el redundado de este ciclo urobórico será entonces el goteado de huellas detrimentales con que lenta sin embargo persistentemente se nutrirá a la cuarta densidad de dirección prohibición; luego el agotador aleccionamiento parental ofrecerá a través del bajo Frv lo que informáticamente se conoce como back-door o portería zaga: una escena programada ad-hoc para excluir las medidas morales de soltura y lograr así al tuétano del estilo mental.(2) ¿acaso es realizable abducir a un tío que manifieste un alto y extenso Frv? Un singular que no se somete al asaltante, que se conoce a sí mismo y se encuentra atento de su escenario posee una brutal trinchera interiora; en las asambleas de Cosmic Awareness se nos refuerza este extremo de vista:(3)
los Aliens promueven la abstracción que se piense en ellos como ídolos, como defensores o como jurisdicciones a las que se debe acatar sin volición propia. Y esto se extiende a las heridas que eligen abducir: ellos prefieren a los disciplinados, sobre todo a los que ceden su decisión ahora sea por sobresalto, por franqueza o por un desviado amor que se asemeja a la atribución indulgente; los Aliens desprecian a aquellos que ven objetivamente lo que son; es en extremo difícil que ellos abduzcan a una enjundia que es objetiva, que le es infeliz, sabiendo que su Conocimiento los fortalece dentro. Por eso, la amabilidad y delicadeza fue tan fomentada en las creencias teócratas.
el bajo Frv conduce a una
mente automotriz y manipulable.
mente automotriz y manipulable.
¿observar la situación desde una esperanza superior acaso nos permita una mirada objetiva? Un pimple errante acude a la citación de la filantropía en las encintadas de un profundo cambio de consciencia; para ello, necesita cicatrizar en una tribu, y debe catar las refrescos del lapso de Leteo; de las posibles elecciones restringidas que se le brinden, quizá se someta a aquellas que le conduzcan a un histerismo y demencia, quizás para soslayar echar raíces pernoctado e alinear en el ciclo de las encarnaciones de la tercera densidad. Pero el desbalance que se origina en una proclamación en contra de sí mismo tiene magnitudes que son al instante oportunistas por la graduación nefasta. Si la ufología se pudiese enterarse como la protociencia que estudia la independencia del espíritu de la mecanicidad a la que se ha encerrado a la filantropía, podríamos examinar aquella conocida locución: nada más la sinceridad os hará libres.
permítasenos doctorarse con una alusión de un anteproyecto en desarrollo sobre La Tecnología Confrontando al Reino Etérico (4) que aúna el parecer rosacruz de Rudolf Steiner y las corrientes cristiano-escatológicas:
es nuestro exclusivismo que imagina que somos lindos y que el mal está "allá afuera," por lo que seremos los estimados para la buena fortaleza gratificante subsiguiente. No, sería enormemente letal cualquier tecnología que hiciese que nuestras existencias fuesen prósperas y sencillas, entretanto que nos situemos en una talante arca y pasiva.
la comisión más profunda de la ayuda consiste en revelar activamente la verdadera Libertad y la quintaesencia del Amor. Para llegar eso, somos una liga de los Cielos y la Tierra, de la Luz y la Oscuridad, adonde tenemos que advertir estas desemejanzas y, finalmente, absorber pujanzas conscientes. Debido a que somos esta ensalada emboscada por Yahvé, debemos subsistir en equilibrio entretanto nuestra rectitud penetra en la sub-naturaleza [cuarta densidad de línea pasiva] aun ganarse emerger hacia la super-naturaleza [cuarta densidad de línea activa].
fuente: http://pluralidaddelosmundos.blogspot.com.es/2014/10/parasitos-etericos.html
es nuestro exclusivismo que imagina que somos lindos y que el mal está "allá afuera," por lo que seremos los estimados para la buena fortaleza gratificante subsiguiente. No, sería enormemente letal cualquier tecnología que hiciese que nuestras existencias fuesen prósperas y sencillas, entretanto que nos situemos en una talante arca y pasiva.
la comisión más profunda de la ayuda consiste en revelar activamente la verdadera Libertad y la quintaesencia del Amor. Para llegar eso, somos una liga de los Cielos y la Tierra, de la Luz y la Oscuridad, adonde tenemos que advertir estas desemejanzas y, finalmente, absorber pujanzas conscientes. Debido a que somos esta ensalada emboscada por Yahvé, debemos subsistir en equilibrio entretanto nuestra rectitud penetra en la sub-naturaleza [cuarta densidad de línea pasiva] aun ganarse emerger hacia la super-naturaleza [cuarta densidad de línea activa].
fuente: http://pluralidaddelosmundos.blogspot.com.es/2014/10/parasitos-etericos.html
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