por Luz Sela
en España se han sabido además extraños riesgos como el de Malasia. La ausencia del hidroavión An17 Grumman sigue sin aclaración 45 años luego. El Triángulo del Silencio es el Triángulo de las Bermudas español. Varios veleros y naves especiales se han borrado allí sin encomendar rastros.
La ausencia del An-17 Grumman en Cabo de Gata es uno de los grandes jeroglíficos de nuestro país
"¡vamos hacia un gran Sol!". Esa fue la última información emitida por uno de los hidroaviones Grumman, de la marina de las Fuerzas Armadas españolas, en 1969. El útil realizaba encajes de ejercicio y ojeo de naos agentes rusos en la ribera Mediterránea, y se esfumó misteriosamente el 1 de julio de ese año en el Mar de Alborán, frente a las expensas de Almería.
a pesar del vivo escudriñamiento porteado a cabo por los naves especiales del Ejército, los tableros de la Armada, y otros efectivos, la cacería fue infructuosa. Tan únicamente se localizaron dos establecimientos, aunque siquiera rastrillo de pasajeros, y mucho a excepción de del boato. Las gobernantes caudillos afirmaron en su término que se trató de la infortunio. Sin más. Y la marcha de exegesis despertó todo tipo de hipótesis y cábalas. 45 años luego, su hogar sigue siendo uno de los grandes enigmas de nuestro país.
“en un artículo informado unos meses más tarde en la gaceta del Ejército del Aire se cataloga como un evento absolutamente inexplicable”, dice josep guijarro, especialista en acertijo y bastonero de la periódica planeta Desconocido. “pero hay más. Ese mismo artículo indicación que dos meses de antemano, el 15 de mayo, otro nave espacial de las mismas características además desapareció”. Catorce personas desaparecieron entre entreambos siniestros.
hay otro más, que en su vencimiento formó parte de los memoriales secretos del Ejército del Aire, luego desclasificado. Ocurrió el 14 de marzo de 1974, alrededor de la ínsula de Cabrera. dos naves especiales de deporte Saeta y otro hidroavión Grumman desaparecen en extrañas esferas, sin desamparar rastro. En el memorial, dice guijarro, no se aclara completamente nada. “el informe del timbre eficaz ligero le condonación corpulencia diciendo que el periodista que redactó la referencia incurre en inexactitudes, es la única exposición que se da. Pero no se dice que el nave espacial desapareció”. Y que, a recorrido de ahora, sigue desaparecido.
el Triángulo del Silencio
el archiconocido Triángulo de las Bermudas, muestra de partidas fantasmales de galeones y aviones, tiene gratitud en nuestro pueblo. Es el triángulo del Silencio. Una área delimitada entre los cuspides de Soller (Mallorca), el cordel de Denia y el Delta del Ebro. “es la jurisdicción en la que se han garrapateado toda una cadena de agitaciones y desapariciones”, explica guijarro. Entre ellas, la del postillón Bañuls, del Ejército del Aire. “por la venidero se fue a atrapar y de ningún modo más se tuvieron nociones suyas. Su galeón fue encontrado, aunque sin señales de haber sido afrontado. Bañuls no estaba en él”.
el pasatiempo de este Triángulo comienza en 1976, cuando un bando de buceadoras escuchan unos alborotos extraños bajo las aguas. Testimonios posteriores aseguran haber contemplado aún objetos luminosos emergiendo desde océano en el interior. Los advertidos lo sitúan como una de las doce divisiones de “aberraciones geomagnéticas de la Tierra”, al equivalente que las Bermudas, aquellas que pueden atravesar turbaciones en las telecomunicaciones y extraños accidentes. Otros le dan una aclaración a excepción de lo razonable y hablan hasta de avistamientos de Ovnis. “bañuls pasó a la exposición de lo paranormal, porque se comentó que este hombruno había inspeccionado un ovni en los años setenta. Se sugirió que podría haber sido abducido”, explica este experto.
a pesar de su gravedad por lo sin fuste, guijarro se inclina por una exposición más terrenal a la ausencia del Boeing 777. Recuerda que en esa superficie no hay iniciales de riesgos similares, aunque sí en una parte del ponto de Japón, manida como “el ponto del Diablo”, un paraje de enigma señalado por el occidente nipón, el boreal de Tokio y un factor del Pacífico, y con una fuerte obra sísmica. En este grado se han certificado populosas marchas de naves y naves especiales, en ocasiones inexplicables.
“lo universal es que sea poco bastante nuestro”, afirma. Hay poco que enlaza este siniestro con lo terrenal, en creencia de los expertos: que los movedizos sigan dando abanico de llamada. “si están sonando es que no pueden estar abajo del caldo, tienen que estar a un mínimo de cinco millas a la costa”, dice David Sentinella, vicepresidente de la Sociedad Española de Investigaciones Parapsicológicas. “en mi opinión, solo hay dos opciones. O el nave espacial ha menguado en algún lugar de la carrascal malasia, o ha sido incautado por un clan terrorista”.
fuente: teinteresa.es/mundo
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